«Lanús es mi lugar en el mundo. Es imposible dejar de querer y estar en la ciudad que me dio algo tan importante para mí, como son los Beatles, además de mis amigos y mi familia».

Javier Parisi es músico, cantante y actor. Pero, además, lleva la figura de John Lennon por el mundo, interpretando sus canciones junto a los cuatro de Liverpool y en su faceta solista. Su parecido físico y profesionalismo lo llevaron no solo a conquistar múltiples escenarios, sino también a vincularse con familiares y amigos del exBeatle.

Todo comenzó a sus 8 años cuando escuchó a la legendaria banda por primera vez.

“Tenía una guitarra de esas de madera con cuerdas de mi viejo, pero bueno, sin saber música hacía que tocaba. Me gustaba entretener, cantarles a mis amigos del barrio. Y cuando escuché a los Beatles fue como un shock, en el buen sentido. Imaginate que en el año ‘88 hacía 18 años que se habían separado, entonces escucharlos era cosa de viejos. Era como ‘el raro’ porque todos estaban escuchando música de aquel momento y yo quería escuchar a los Beatles. Como siempre digo, los Beatles le pusieron color a la música”, relata Parisi en diálogo con Viento Sur.

A partir de ese momento, les pidió a sus padres que lo llevaran a aprender inglés y a tomar clases de guitarra.

“Siempre digo que es importante darles a los chicos las herramientas para que puedan jugar, divertirse, porque la infancia te marca fuerte para después en el futuro sentirse bien en el lugar donde estás”.

A los 19, Parisi conforma una banda tributo a Los Beatles junto a amigos del barrio, que recibió el nombre de los Fab Four de Liverpool.

“A medida que fueron pasando los años, algunos chicos comenzaron a estudiar otras cosas. Bueno, se fue separando más allá de que seguimos siendo grandes amigos y nos seguimos viendo siempre. Fueron apareciendo nuevos integrantes hasta que en el año 2018 conocemos a Alan Williams, el primer manager de los Beatles, que había venido a la Argentina, nos vio y nos recomendó para tocar en la Beatles Annual Convention de Inglaterra el próximo año, así que fuimos. Yo no podía creer estar parado y tocando en los mismos escenarios donde tocaban los Beatles, conocer el lugar donde nacieron, donde se desarrollaron musicalmente sus primeros años, e incluso conocer gente que iba a ver sus shows. Eso fue un gran empujón porque cuando volvimos a Argentina nos empezaron a ver con otros ojos acá y en Sudamérica”.

Mientras continuaba con su banda, Parisi comenzó a recibir propuestas de Inglaterra para actuar de manera individual.

“Había algo que estaban viendo los ingleses que indudablemente yo no veía. En esa época también, empecé a subir videos a las redes cantando y recreando a Lennon, con un trabajo más de caracterización que supera al parecido físico, es otro tipo de estudio que es el que hacen los actores en Hollywood a la hora de recrear un personaje. También entrené más en el acento específico de Liverpool, es decir, le puse un plus a mi trabajo personal”.

De ahí en más la carrera de Parisi no dejó de escalar: fue convocado para personificar a John Lennon en una obra musical en Liverpool, lo que lo llevó a mudarse a Inglaterra y alojarse nada menos que en la casa de Helen Anderson, amiga de Lennon y diseñadora de sus clásicas gorras de cuero. Allí, además, conoció a familiares y otras amistades del músico.

“Fue un antes y un después en mi carrera profesional. Eso es indudable, porque estar con ellos me dio una exposición muy grande a nivel mundial. Conocí a Julia, la hermana de Lennon, a Julian, su primer hijo, entonces fue muy fuerte esa cuestión. Y hablar con ellos me mostró un Lennon de carne y hueso, con sus cosas. Pero, yo siempre digo lo mismo: él no iba a un psicólogo, el psicólogo eran el papel y el lápiz y hacía catarsis a través de la música. Creo que obtuve un máster de Lennon, que a mí me sirvió muchísimo desde el hecho de por qué miraba, cómo miraba y por qué caminaba, cómo caminaba, todo tiene un por qué entonces estudiarlo y trabajarlo desde adentro me hizo enriquecer muchísimo al personaje”

Pero no solo la música sería parte de la vida de Parisi: llegaron documentales, clips y producciones cinematográficas como el film Lennons, que se estrenó el año pasado en nuestro país. Hasta tuvo su propia edición limitada de café peruano en Rockcafé.

¿Esperabas todo esto?

No, la cosa se hizo cada vez más grande, pero linda en algún punto. Uno lo ha soñado y ha trabajado en eso también, soy muy consciente de eso. El que me conoce sabe que soy Javier Parisi y no un loco que se cree Lennon. Eso es lo que me abrió las puertas no solo laborales, sino también con la familia y amigos. Hoy me encuentro grabando un disco para Indonesia del rock pop de allá pero cantadas en el estilo de Lennon, y hay composiciones nuevas que también se pueden escuchar en Spotify (click aquí).

¿Te sentís un embajador de Lennon en el mundo?  

Casualmente la hermana de Lennon me pidió ser el embajador de su libro en los países hispanohablantes, ella editó Imagine this. My brother John Lennon y después sacó la versión en español Imagine this. Creciendo con mi hermano John Lennon. Así que lo pensé un segundo y lo acepté, claro que sí. Haciendo lo que yo hago, le acerco a la gente esa imagen y pueden abrazarte, sacarse una foto o charlar con alguien al cual ellos admiran y quieren mucho. Uno no solo entrega canciones, detrás de cada persona hay una historia y lo que uno hace está modificando y cambiando el día a esas personas para bien, entonces es muy lindo sentirse involucrado

Recibiste un reconocimiento del club Lanús, ¿se podría decir que sos «profeta en tu tierra»?

Para mí fue como entrar al Club de Liverpool, me sentí muy feliz porque yo a todos lados donde voy, mis colores y mi ciudad me los llevo siempre, y eso es también lo que me abre muchas puertas. Soy una persona simple y común, que lleva su barrio a todos lados.

Más información sobre Javier Parisi en https://javierparisi.com/

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