El ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, marcó hoy un paralelismo entre la agenda ambiental y la economía, y aseguró que el uso de glifosato no sólo trae complicaciones en la salud de las personas, sino que también puede acarrear problemas en el comercio internacional.
“La soja permite el ingreso de divisas, pero utiliza glifosato que daña la salud. Y esta no es una discusión campo versus ciudad, sino que es algo que lo determina la ciencia. Entonces decir que el glifosato trae problemas de salud es ir en contra de ciertos intereses y eso me valió que varios portales hablaran mal de mí y hasta me amenazaran de muerte. Por otro lado, en poco tiempo Europa va a dejar de comprarnos carne porque el ganado está en zonas donde se fumiga con glifosato y lo mismo ocurre con el trigo y la soja, que no solamente exportamos a China”, explicó el funcionario en el marco de la conferencia «Ambiente, Pobreza y Desarrollo» brindada hoy en nuestra universidad, en la que participaron la rectora Ana Jaramillo; el director del Departamento de Desarrollo Productivo y Tecnológico, Pablo Narvaja; y la directora de la Licenciatura en Gestión Ambiental Urbana, Sol Quiroga.
En esta línea, Cabandié se refirió al tema de Vaca Muerta: “No digo que haya que cerrarla pero sí tengo la obligación de alertar sobre el fracking. Es más cómodo no decirlo, pero hay que poner las cartas sobre la mesa. Como sociedad estamos obligados a modificar prácticas. No hay plan B”.
El Ministro también habló sobre la importancia de la encíclica Papal Laudato Si’ de 2015 que “marcó un antes y un después porque fue más allá del ámbito eclesiástico y sirvió de preámbulo para el Acuerdo de París (COP25) firmado a fines de ese año, donde los países expresaron la necesidad de modificar prácticas productivas”.
“Existe una responsabilidad colectiva, pero hay que diferenciar a los países que han degradado el ambiente y eso les permitió posicionarse como potencias, en detrimento de otras naciones”, agregó.
Al ser consultado sobre la gestión de residuos, Cabandié dijo: “El tratamiento de los residuos no ha sido una política nacional, porque depende de cada municipio. Pero tenemos que coordinar actores porque los residuos son fuente de recursos y empleo. Hay que poner este tema en debate especialmente para las personas más humildes que viven cerca de los 5 mil basurales a cielo abierto que tenemos en el país”.
“Como país no hemos abordado correctamente los temas ambientales. Hace mucho tiempo que no están en agenda. Si no repensamos nuestras prácticas y hábitos productivos y culturales se van a ver más cambios en el ambiente. No hay que tomar la agenda ambiental como algo colorido o simpático, sino seriamente”, concluyó.
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