Este 21 de septiembre se celebra el Día del Estudiante en un contexto especial signado por la educación a distancia, las clases virtuales, y las escuelas y universidades cerradas. Sin embargo, la pandemia no frenó el compromiso y dedicación de los jóvenes.

La Organización de las Naciones Unidas aseguró este año que “los problemas actuales, como el COVID-19 y el cambio climático, requieren una acción mundial conjunta y la participación y el compromiso de los jóvenes es fundamental para abordarlos de manera eficaz”.

Es por este motivo que desde el principio del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) decretado en el país, un grupo de estudiantes integran el Voluntariado impulsado desde nuestra universidad, con el objetivo de asistir a las personas mayores de la comunidad y a aquellas que se encuentran en los grupos de riesgo.

Las acciones que llevan adelante son simples, pero no por eso menos importantes y comprometidas. Mandados cotidianos, compras de alimentos y medicamentos, y algún trámite son algunas de sus responsabilidades.

Claudia Valenzuela es estudiante del cuarto año de la Licenciatura en Enfermería. Su función es la de colaborar con el armado de los bolsones de mercadería que el Sistema Alimentario Escolar (SAE) distribuye entre los estudiantes de las escuelas de la región.

“Me sumé porque me gusta ayudar a los demás y ser solidaria. Además, me enteré que una mujer del barrio había sido mamá y había perdido al esposo por Coronavirus. Entonces con otros compañeros de cursada nos organizamos para conseguirle ropa, pañales y leche. Me parece excelente que la universidad nos de estas oportunidades de poder aportar a la comunidad”.

Liliana Silvero está a un paso de recibirse de Enfermera y es otra de las voluntarias que se unió al proyecto. Su rol es el de realizarle las compras a una señora de 92 años y a su hijo, que posee movilidad reducida.

“Creo que el ayudar al otro es como una obligación que tiene un ser humano para con el otro. Esta experiencia me hizo dar cuenta que no necesariamente la ayuda es o debe ser material o económica, que con un poco de tu tiempo podés hacer maravillas, porque no solo ayudás a que esa familia pueda tener  su medicación o sus compras de alimentos, sino que también al escucharlos o charlando con ellos estás haciendo mucho. Esa satisfacción que sentís después de ver que el otro se siente bien, no te la saca nadie”.

Silvero, además, agrega que estas iniciativas sirven para que “el vecino sepa que la universidad está de alguna manera relacionada con ellos y no aislada.  Hay una situación de ida y vuelta entre comunidad y universidad, y eso es algo muy importante”.

¿Por qué el Día del Estudiante se celebra el 21 de septiembre?
El Día del Estudiante coincide con el inicio de la primavera, pero ese no es el motivo de la celebración.

El 21 de septiembre fue elegido porque ese día pero de 1888, llegaron a Buenos Aires los restos repatriados de Domingo Faustino Sarmiento, quien durante su Presidencia construyó más de 800 escuelas.

La inclusión de esta fecha en el calendario se debió a la propuesta presentada por el arqueólogo Salvador Debenedetti en 1902, cuando era parte del centro de estudiantes de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.

Artículos Relacionados

Hacer Comentario