Santa Fe Litoral

Lena Szankay nació en Buenos Aires y se crió en el seno de una familia a la que define como «transcultural»: Su madre era argentina, su padre húngaro y su padrastro alemán. Esta fusión la llevó a vivir en distintas partes del mundo como Perú, donde coqueteó por primera vez con la fotografía, y Alemania, donde vivió 18 años, siendo testigo de la caída del muro y la unificación del país.

En su vuelta a la Argentina, Lena tenía el deseo de registrar con su cámara una casa antigua de fotografía llamada Fotobonaudi, ubicada en Sunchales, provincia de Santa Fe. Hasta allí viajó junto a unos amigos que vivían en esa región.

“El negocio estaba a cargo de una familia de cinco hermanos inmigrantes italianos y cada uno tenía una función específica en el emprendimiento: las tomas de estudio, revelado en el laboratorio, otras personas se ocupaban de finanzas y las entregas. Entonces empecé a fotografiar el lugar, me encantó ver los telones de fondo pintados, como se usaba en esa época, las habitaciones de esa gran casona, y me quedé tan enamorada de Santa Fe que decidí presentarme a una beca de creación del Fondo Nacional de las Artes justamente para saber qué se escondía en esa provincia, más allá de la casa de fotografía. Yo porteña, con 20 años de vida en el exterior, tenía cierta impronta de romanticismo sobre ese lugar medio quedado en el tiempo, pero me encontré con una escena contemporánea juvenil muy fuerte, creativa, con muchos artistas. Obtuve la beca y empecé a hacer mi interpretación del territorio, siempre de la mano de mis amigos que tenía ahí”.

Las fotos fueron tomadas entre el 2009 y 2011 y son producto de varios viajes que la fotógrafa realizó a ese lugar, en pos de recrear una identidad de la región. De esta manera nació la muestra “Santa Fe Litoral” junto con un libro del mismo nombre.

“Creo que hasta ese momento no había tantos trabajos documentales artísticos sobrelas regiones. En la escena local, la fotografía estaba en un momento más experimental y de trabajar en series, además de los montajes digitales, que recuerdo, me llamó mucho la atención. Este fue mi primer trabajo en digital de captura directa.

¿Cómo lograste construir esa identidad regional? ¿Qué elementos tuviste en cuenta?

Hay un tema importante con la humedad y lo opulento de la vegetación y por eso la serie se llama Santa Fe Litoral, porque para mi el litoral huele a calor, a humedad, a verde y a siesta, ese momento en el que a una determinada hora de la tarde todo se apaga y la calle es un desierto y las casas están silenciosas, tranquilas. También hice muchas fotos en Rincón (San José de Rincón), que está más cerca del río y 15 kms alejado de la ciudad. Mucha gente se instaló ahí a hacer su vida creativa y hoy es un lugar donde hay mucha gente joven, que hace sus casas de barro y vive más en comunidad.

Pasaron muchos años, yo recién llegaba del exterior y lo primero con lo que me enganché estaba a 500 kilómetros de donde vivo y me parecía uno de esos lugares que sostienen a un país, es decir, una pequeña localidad donde existe el arte, la música electrónica, un estilo de vida alternativo, lo que define que un país tenga identidades culturales muy diversas. La muestra refleja una relación muy amorosa con lo que me recibió.

¿Cómo lograste fusionar lo documental con el arte?

La verdad es que es la única manera que tengo de ver las cosas, es mi estilo. La fotografía tiene múltiples lecturas, es abierta. Y creo que las fotos también muestran el hechizo que yo tenía, como cuando uno se enamora de alguien y ve todo “lindo”.

¿Por qué la fotografía?

Comencé de muy chica, de adolescente hice un curso de extensión en una universidad de Lima, Perú, que era donde yo vivía en ese momento. Después estudié literatura porque me gustaba la poesía y considero que tiene que ver también con imágenes, pero dejé y me dediqué a la fotografía desde temprano, 21, 22 años. Tengo mucha influencia de lo pictórico también, y ahora estoy en el mundo audiovisual. Siempre estuve muy orientada a la imagen, la música y el movimiento.

¿Qué sentís de exponer en la universidad donde, además, sos docente?

Estoy re contenta, me parece que abrir esa fotogalería en el Aula Magna es un gran hallazgo. Es un lugar que cobra vida, me sorprendí al ver la muestra colgada. Creo que es importantísimo que en nuestra universidad se puedan ofrecer exposiciones, especialmente con la oferta de carreras como Audiovisión y Diseño. Entre los docentes hay muchos artistas, además de un nuevo rector que es director de orquesta (Daniel Bozzani) y faltaba que esto se ponga más en evidencia.

¿Qué les transmitís a tus estudiantes?

En general les digo que tienen la libertad de trabajar como quieran, pero tienen que trabajar. Trato de desestructurar los miedos, el miedo al error, a la equivocación, que es la única forma de aprender. En los últimos años me enfoqué en trabajar sobre los objetos de la vida cotidiana, con una mirada artística y creo que es la mejor forma de avezar la mirada, mirar lo que nos rodea y casi no vemos. Aparte, después de la pandemia, hicimos un gran cambio en la materia que fue integrar al celular como dispositivo, los resultados son asombrosos.