Durante los días 12, 13 y 14 de octubre la Universidad Nacional de Lanús realizó la novena edición de ExpoCarreras, la muestra abierta en la que año a año la UNLa expone las carreras que se dictan en esta Casa. Este año, la novedad fue que la sede de la Expo fue el campus universitario, gracias a lo cual más de 3500 jóvenes de escuelas secundarias tuvieron la oportunidad de proyectar su futuro “in situ”, en los pasillos, aulas y espacios verdes de la comunidad universitaria. Al respecto, Fernando Bóveda, Inspector en Jefe del distrito de Lanús, le dijo a Viento Sur que “es agradable ver esta cantidad de alumnos secundarios conociendo y reconociéndose en la Universidad, porque a veces para poder lograr una meta hay que visualizarse en el trayecto. Por eso, este es un hecho para celebrar.”
Autoridades, docentes, no docentes y alumnos de la UNLa trabajaron de manera mancomunada en una actividad inédita. No solo se les repartieron a los estudiantes secundarios folletos con la oferta académica, perfiles de egresados y salidas laborales, sino que también se realizaron visitas guiadas con un circuito por el campus de dos horas de duración. La guía estuvo a cargo de alumnos de la Licenciatura de Turismo. Al respecto, Belén Olloa, alumna-guía, nos dijo sobre su rol que “estamos muy contentas de mostrar nuestra universidad y de alentar a otros a estudiar. Nuestras expectativas están por los cielos”.
Vimos pasear a los jóvenes secundarios en grupos, de manera atenta y también distraída, escuchando relatos institucionales vinculados a los servicios que la UNLa brinda a la comunidad, a sus valores y a su historia. También pudieron disfrutar de talleres relacionados con las carreras en los que pudieron acercarse de una manera lúdica a los ejes problemáticos que aborda cada una de ellas. Charlamos durante esos recorridos con un alumno de la Escuela de Arte y Música Nro. 28, quien dijo que “La expo me copa porque en estos años estoy perdido, no sé qué voy a seguir y esto me viene bien para ver qué me gusta y quiero para un futuro”. Luego, una de sus compañeras agregó: “La expo viene bien para ir buscando lo que vas a hacer más adelante. Quizás tenés una idea, pero no tan clara”.
Durante los tres días de Expo visitaron la UNLa alumnos de escuelas secundarias, Centros Educativos de Niveles Secundarios (Cens) y Escuelas Técnicas. En total asistieron 136 escuelas públicas y 10 privadas de las zonas de Adrogué, Alejandro Korn, Avellaneda, Banfield, Brandsen, Budge, Cañuelas, Claypole, Dock Sud, Guernica, Lanús, Lavallol, Lomas De Zamora, Longchamps, Monte Grande, Presidente Perón, Rafael Calzada, Francisco Solano, Temperley, Turdera, Villa Albertina y Villa Fiorito.
En el hall del edificio José Hernández se concentraron varios stands. La UNLa dispuso uno por cada Departamento Académico y también algunos vinculados a Direcciones tales como la de Bienestar Universitario, que presentó las becas y programas de acompañamiento a los estudiantes. También participaron con stands dos Universidades Nacionales (Universidad Nacional de Avellaneda y Universidad Nacional de Lomas de Zamora), ocho Institutos Superiores de Formación Docente y dos gremios docentes.

Tres días en el campus
Sergio Remesar, docente concursado del Departamento de Humanidades y Artes, participó también como guía en la Expo. De su experiencia resaltó que “Inicié mis actividades en la Universidad en el año 2004 y cuando llegué este campus recién se estaba armando. Es muy lindo compartir con alumnos el proceso de cómo fue creciendo la Universidad, cómo en tan poco tiempo se hizo tanto”.
Lautaro Clarici, no docente de la Dirección de Pedagogía Universitaria, también compartió con nosotros sus impresiones: “A los alumnos se los veía contentos. Nosotros tratamos de hacer hincapié en que más allá de las carreras que elijan, hay un montón de actividades vinculadas con la comunidad a las que también pueden acceder. Fue un desafío enorme participar de la Expo, porque más allá de que hice la Tecnicatura en Turismo y que la UNLa arquitectónica e históricamente está muy buena, lograr capturar el interés de los estudiantes secundarios no era una tarea fácil. Pero lo logramos y la Expo superó ampliamente mis expectativas”.
Por último conversamos con Valeria Suárez, Secretaria Académica y una de las organizadoras de la Expo. Ella destacó que “En este contexto hay que dar todo más que nunca, y aunque no tuviésemos presupuesto, tuvimos que ser muy creativos para que los alumnos secundarios puedan sumarse al sistema universitario. El sistema les va a mejorar sus condiciones materiales de existencia y nosotros tenemos un rol social que cumplir. Este año quiero resaltar el apoyo de todos y quiero agradecerles”.

Paseo por la historia
Era jueves y la jornada amaneció lluviosa. A pesar de ello, 18 escuelas se acercaron a la Universidad. El mal clima no iba a detener el anhelo de orientación de 737 jóvenes de la zona. Y las visitas del turno mañana se hicieron igual. Cerca de las 11 el sol se fue asomando de a poquito.
Una de las estaciones de las visitas guiadas estuvo a cargo de Alejandro Tornay, Director de la Licenciatura en Tecnologías Ferroviarias. Veintisiete adolescentes de entre 16 y 18 años lo escuchaban, mientras contemplaban un vagón de carga que forma parte de los monumentos de la UNLa: “Como verán sus ruedas descansan sobre rieles. Estos no son los rieles clásicos que estamos acostumbrados a ver, porque esta es tecnología antigua. Estamos frente a un bogie de la década de 1920–1930 que fue fabricado y reparado en el país. Está acuñado en los talleres de Liniers del Ferrocarril Oeste y forma parte de nuestra industria ferroviaria. Y este predio de la UNLa era un predio ferroviario. Acá se fabricaban y reparaban gran cantidad de los elementos que se utilizaban para la circulación del ferrocarril. ¿Saben en qué año circuló por primera vez en el país el ferrocarril? En 1857, cuatro años después de la promulgación de la primera Constitución Argentina. Entonces podemos asociar el desarrollo nacional con el desarrollo del ferrocarril. Estuvimos entre los diez países de mayor extensión de línea férrea en el mundo, 45 mil kilómetros. Toda esa industria, vinculada a la metalúrgica, fue la que dio impulso al desarrollo del país”.
En el mismo momento otros grupos se detenían en otras estaciones como el Mural Colectivo realizado en el edificio Irma Carrica, en la visita al estudio de grabación “Enrique Santos Discépolo”, o en la actividad deportiva y recreativa organizada por la Dirección de Deportes.

Talleres interactivos
“Mi nombre es Martín, soy profesor de Microbiología de la Licenciatura en Tecnología de los Alimentos y estamos en el Laboratorio Oscar Varsavsky”. Así se inició uno de los talleres ante un grupo de 10 alumnos secundarios quienes recibieron la charla rodeados de alumnos universitarios con delantales blancos que seguían con sus prácticas. “Acá evaluamos la contaminación microbiológica de los alimentos. Habrán escuchado hablar de los tres tipos de microorganismos: hongos, levaduras y bacteria. Son organismos vivos no visibles al ojo humano. Todos los alimentos tienen algún nivel de contaminación con microorganismos, salvo los enlatados que son estériles. Lo que se evalúa aquí es que el nivel de contaminación sea el mínimo posible, por eso los alimentos tienen fechas de vencimiento. Lo que buscamos es evitar que los alimentos sean peligrosos para la salud” prosiguió Martín, quien luego les contó a los asistentes cuáles eran los procedimientos de trabajo. “De elegir esta carrera, ustedes podrían trabajar en empresas públicas y privadas. Pueden trabajar en empresas elaboradoras de alimentos, tanto en la producción y sus procesos de higiene, como en los laboratorios de análisis. Todas las grandes empresas de alimentos tienen un laboratorio como este y uno de química. La otra salida laboral posible y en el sector público es como inspectores bromatológicos. Es decir que, como representantes del Estado, saldrían a controlar las normas de calidad e higiene de por ejemplo un restaurant”. Talleres similares realizaron todos los Departamentos y sus respectivas carreras.

Muestras
María Elena Boschi, Directora de la Licenciatura en Nutrición del Departamento de Salud Comunitaria, estuvo a cargo de la organización del taller “Canto popular de las comidas. Soberanía, alimentación e integración latinoamericana” junto con el Centro Manuel Ugarte y la carrera de Tecnología de los Alimentos. La actividad consistió en la visita de representantes de cinco países latinoamericanos que mostraron sus platos típicos y su acervo cultural alimentario. Para ello se dispusieron gazebos al aire libre en donde cocinaron y compartieron recetas. “Del Perú prepararon ají de gallina y papa a la huincaína; de Venezuela sus tradicionales arepas; de Haití, banan fri ak krio; de Paraguay, la sopa paraguaya; y de República Dominicana, los porotos dulces -que estaban muy buenos- y sancocho de pollo y verduras”, nos contó María Elena. La actividad consistió también en la visita a la huerta comunitaria. Allí se mostraron los beneficios de una huerta y cómo es posible desarrollarla en distintos ámbitos y espacios. “Los alumnos estaban interesados en saber qué es preferible y factible de sembrar y sus costos. Con los agroproductores lo que les interesó fue cómo era hacer emprendimientos en huertas y seguir cuidando el ambiente”, agregó la directora.
Por su parte, el Departamento de Desarrollo Productivo y Tecnológico organizó una Muestra de Energías Alternativas y Educación Ambiental y presentó formalmente el Biodigestor, un contenedor hermético que permite la descomposición de la materia orgánica y facilita su uso como energía; el Departamento de Planificación y Políticas Públicas realizó una Muestra con los Pensadores Latinoamericanos presentes en la UNLa; y el Departamento de Humanidades y Artes organizó el Festival de Audiovisión Rock realizado en la sala de teatro “Cátulo Castillo”.

 

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