En estos días de cuarentena con toda la familia en casa, los y las invitamos a retomar algunos fundamentos de la campaña “Juguemos sin pantallas” referidos a niños y niñas menores a los 2 años.

El desarrollo infantil es la manifestación de habilidades neurológicas, emocionales, psicológicas y sociales adquiridas por los niños. Cuanto más armónico sea su desarrollo, más saludable será su desempeño vital. Para ello es necesario que en su crianza, los niños sean acompañados por experiencias de amor, disfrute, arrullo lingüístico y humano, contacto corporal y juego real, además de una condición física saludable y correcta alimentación. Pero, en algunas ocasiones, la tecnología interfiere con esta necesidad y deja al bebé sumido en una conexión digital que poco aporta en las edades más tempranas (0-18/24 meses).

Es muy frecuente que las madres, padres y cuidadores utilicen sus pantallas mientras están ejerciendo funciones de crianza. Esto genera que los bebés quieran poseer ese objeto “tan valioso”, siempre a mano y de fácil acceso.

Por eso en estos días de aislamiento social recomendamos:

★ No exponer al bebé a ningún medio digital entre los 0-18/24 meses, salvo videochat en caso de lejanía de familiares por la cuarentena.

★ Entre los 18/24 meses, en caso de querer introducir este tipo de entretenimiento, se recomienda buscar programas de calidad. Es fundamental además, que un adulto acompañe la visualización del programa, aplicación, cuento, con el fin de compartir, interactuar y explicar por si surgiese esta necesidad. Así esta práctica puede ser enriquecedora y evita el consumo solitario que tiende al aislamiento del niño.

★ Apagar televisores y otros dispositivos si no se los está mirando, porque los adultos hablan menos con los lactantes y niños si está ese ruido de fondo. Además en la TV solo aparecen temas reiterativos vinculados con el coronavirus que los niños y niñas en muchos casos aún no son capaces de comprender, aunque sí los tonos, que pueden aumentar sus angustias y sufrimientos.

★ No exponer a pantallas a nuestros niños una hora antes de dormir.

★ Evitar el uso de dispositivos digitales como único recurso para que los chicos se calmen. 

En relación con los adultos, modelos vivos para nuestros niños:

★ No usar el celular al dar la teta. Las miradas entre la madre y el hijo en esos primeros meses son fundantes del apego, el diálogo, la confianza y el amor.

★ Que el tiempo de juego que todo niño necesita para aprender sea brindado sin mediación de las pantallas digitales. Ese tiempo perdido no tiene forma de recuperarse.

★ Se recomienda elegir un sector del domicilio libre de pantallas para disfrutar del intercambio pleno en familia y compartir las comidas sin pantallas encendidas.

★ Promover actividades corporales para limitar el sedentarismo.

Proponemos recrear con los niños y niñas actividades vinculadas con lo sonoro tales como canciones o audiocuentos; lo imaginativo comoarmar historias con los objetos de nuestra cotidianeidad; recrear habilidades con las manos, tales como actividades con masas, témperas y/o crayones. Y por qué no, intentar hacer sonidos y ritmos con todos los elementos de la cocina. 

Y por supuesto, no olvidar lavarse las manos constantemente; extremar medidas de higiene de los espacios comunes y estratégicos del hogar; estornudar en el pliegue del codo y no tocarse la cara.

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