Las imprescindibles Bibliotecas Populares

El 23 de septiembre se celebra el Día de las Bibliotecas Populares en el 152º aniversario de la creación de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP). En esta fecha especial, conversamos con referentes de tres bibliotecas centenarias y vecinas: con María Virginia de Torres, presidenta y bibliotecaria de la Biblioteca Popular Alberdi (Remedios de Escalada); con Jazmín López, bibliotecaria de la Biblioteca Social y Popular Libertador San Martín (Lanús Este) y con Gustavo Lauria, presidente de la Sociedad de Educación y Biblioteca Popular Antonio Mentruyt (Lomas de Zamora).

¿Los objetivos de la biblioteca fueron cambiando en el transcurso del tiempo?

María Virginia de Torres (BP Alberdi): Tratamos de sostener las enseñanzas que nos dejó el Dr. Melo, fundador de la Biblioteca Alberdi en 1919. Él fue un médico entrerriano que atendía gratis y lo que se propuso fue vivir para el prójimo. Eso incluía a la cultura. En ese momento, Remedios de Escalada estaba conformado por ferroviarios muy humildes, y lo que se buscó era que pudieran acceder a libros, a una educación, aunque no tuvieran recursos. Tratamos de mantener eso, brindando lo mejor a nuestro pueblo.

Jazmín López (BP San Martín): La Biblioteca Libertador San Martín cumplió 106 años el 7 de septiembre. Fue creada en 1917 por un grupo de vecinos del barrio de Lanús. Entonces, los vecinos se juntaban los sábados a jugar ajedrez, damas o dominó, y ahí les surgió la idea de crear un espacio que garantizara el acceso a la cultura, a la información y a los libros. En esa época, los libros eran muy costosos. Sus fundadores, todos socialistas, salieron a convocar a los vecinos casa por casa. Primero armaron un local que alquilaban y más adelante compraron esta casa con fondo. Soñaban democratizar la cultura, el acceso a la información y este proyecto sigue intacto, aunque va cambiando porque el contexto también cambia. Hoy circula mucha información y hay más acceso a la tecnología. Además, somos más habitantes.

Gustavo Lauría (BP Mentruyt): Primero se fundó una Sociedad de Educación sobre el 1900, y luego surgió la idea de la creación de la biblioteca en 1913. Así nace la Sociedad de Educación y Biblioteca Popular Antonio Mentruyt. Sus objetivos entonces tenían que ver con acercar a la población de Lomas un material que no era tan habitual, el libro; como así también, promover la lectura y resguardar la cultura. En la actualidad, los medios, las redes, Internet y demás, han puesto a las bibliotecas en un lugar diferente. Hay un dicho muy acertado: Google te trae cien mil respuestas a tu pregunta y el bibliotecario te da la respuesta correcta. Así, el desafío es justamente la utilización de estas herramientas, pero los objetivos se mantienen.

¿Con qué acervo bibliográfico cuenta la biblioteca?

María Virginia de Torres (BP Alberdi): Tenemos cuarenta mil libros. Tratamos de mantener el fondo bibliográfico tradicional, que comprende generalidades, pasando por libros de historia y de todas las ramas de la ciencia y de la literatura. El mayor fondo es el de literatura para adultos, adolescentes e infancias. Tenemos una biblioteca infantil importante y una bebeteca.

Jazmín López (BP San Martín): Contamos con treinta mil libros y tenemos como especialidad, libros de educación. En la esquina de la biblioteca hay un profesorado de nivel inicial y superior y la consultan mucho. También la Cruz Roja está cerca, por ello tenemos libros especializados en enfermería. Y tenemos una importante colección de libros de ficción y novelas. También, un lugar especial de literatura infantil, y estamos creando una bebeteca.

Gustavo Lauría (BP Mentruyt): Recibimos del escritor lomense, Roberto Payró, la donación de su biblioteca personal y tenemos una sala de la biblioteca que lleva su nombre. Además, contamos con la colección de la Revista Caras y Caretas más completa del país. Muchas veces, incluso la Biblioteca Nacional ha recurrido a nosotros para consultarnos por fascículos que nos tienen como únicos propietarios. Los libros que tenemos son aproximadamente cuarenta y cinco mil.

¿Cómo es el vínculo con la comunidad y cuáles son las actividades que promueven?

María Virginia de Torres (BP Alberdi): El vínculo es muy fuerte porque estamos en el corazón de Escalada. Además, este año nos dedicamos a dar talleres gratuitos para niños. Todas las semanas tuvieron taller literario, ajedrez, dibujo, caricatura, taller de cuento y de arte. Después está el ajedrez para adultos, con aranceles de mil quinientos, dos mil pesos por mes. Y tenemos el curso de instalación de aire acondicionado que es muy buscado. Este curso es arancelado, pero los participantes salen con matrícula nacional. Nuestra idea es dar lo más, de la manera más accesible. Y contamos con un ciclo de jazz desde hace cinco años que toca de modo gratuito todos los segundos martes de cada mes.

Jazmín López (BP San Martín): Tenemos talleres arancelados, pero con precios populares de guitarra, de piano y violín. También de teatro, de escritura creativa para niños, adolescentes y otro para adultos. De narración, de dibujo, canto, de memoria, de tejido y un curso de gimnasia pasiva para adultos y personas que necesitan una gimnasia más tranquila. También hay un taller de ajedrez que es gratuito. Además, visitamos escuelas y recibimos la visita de escuelas. Lo mismo con otras instituciones. Hacemos muchísimas actividades culturales gratuitas, como una vez por mes, una narradora que cuenta cuentos para infancias. También hacemos narraciones para adultos, obras de teatro, conciertos de música en vivo.

Gustavo Lauría (BP Mentruyt): Desde su inicio la biblioteca siempre ha ofrecido diferentes cursos, talleres y actividades. A la fecha tenemos quince talleres con orientación artística y se suman también los talleres tradicionales como los de alta costura e idiomas. En ese sentido, se ofrecen cursos de calidad a valores muy competitivos. Esto genera que la biblioteca tenga un movimiento diario importante. También tenemos visitas guiadas que hacemos para las instituciones en general, particularmente las educativas. Y como tenemos una sala teatral, las visitas se complementan con una función teatral. Así, buscamos promover una mirada más integral alrededor de los autores y no quedarnos solo con un cuento. 

¿El avance tecnológico es una amenaza para la actividad de la biblioteca?

María Virginia de Torres (BP Alberdi): Totalmente. Me preocupan, por un lado, las generaciones nuevas porque muchas no tienen contacto con los libros en papel. Qué va a pasar si dejan de leer el libro material. El chatGPT también me asusta. Nunca sentí una amenaza cuando apareció Internet, o el libro digital, pero esto sí. Sería necesario que los educadores en las aulas promuevan también el libro, y no solo la hoja de Wikipedia o el uso del celular. Familiarizarse con las bibliotecas es necesario, porque las tecnologías limitan el vocabulario y la actividad docente también se empobrece.

Jazmín López (BP San Martín): Para mí no, pero tenés que ir cambiando. Muchos seguimos leyendo el libro en papel, y no es porque no tenemos acceso a la tecnología.

Gustavo Lauría (BP Mentruyt): El desafío que tenemos es la integración con las herramientas digitales o de consulta digital y que la biblioteca sea también un lugar de referencia ante la consulta. Porque muchas veces, el mar de información es muy parecido al mar de la ignorancia, y la demasía sobre una misma cuestión imposibilita identificar con claridad cuál es el dato importante o certero. Por eso, la calidad de la información de las bibliotecas y el servicio que brinda, tiene un valor agregado irremplazable.

¿Cómo es el vínculo con el Estado?

María Virginia de Torres (BP Alberdi): Desde el Municipio, no existe.  Desde la Provincia un poco más y sobre todo económico. Después CONABIP siempre está. Con ellos hay un vínculo muy allegado. Presentás un proyecto y responden. Siempre hay una línea que se ajusta a lo que vos estás queriendo hacer. Este año vamos a presentar el archivo digitalizado del periódico La Idea. Vamos a presentar desde el año 1916 hasta el 1983 digitalizado por completo. Va a estar cargado cada título del diario y si se trata de un casamiento, cargamos el nombre y apellido del novio y la novia. Esto lo armamos para los cien años de la biblioteca y el mes que viene lo presentamos.

Jazmín López (BP San Martín): Ahora que se sancionó la ley nacional que protege a las bibliotecas populares, estamos más tranquilos. Tener una biblioteca es un trabajo muy grande, que compromete a las bibliotecarias, a las voluntarias y a mucha gente. A nivel provincial, con la última gestión fue un poco mejor. Por lo general, los subsidios de provincia no faltan, aunque no están llegando tantos libros. Será porque tenemos un problema con la personería que estamos arreglando. A pesar de eso pudimos ir a la Feria del Libro y comprar con el cincuenta por ciento de descuento. Hay apoyo. Ahora, desde el Municipio de Lanús, no hay nada. Solo humo. 

Gustavo Lauría (BP Mentruyt): Las políticas del Estado y su impacto en la biblioteca son directos. CONABIP otorga subsidios anuales para quienes persiguen el sostenimiento de la actividad, y también a nivel provincial, con un aporte de subsidio mensual para pago del sueldo de bibliotecarios. Así, el acceso a subsidios es determinante para nosotros. Y no solo por la ayuda económica, sino también en la articulación de otras cuestiones y actividades como la Noche de las Bibliotecas Populares de la que vamos a participar este sábado.